Juanjo Ramos
No hace demasiado tiempo, en la escuela no había más material didáctico que el profesor y una pizarra. Ahora, con los avances tecnológicos y las nuevas herramientas digitales, la educación está experimentando un espectacular viraje de 180 grados. El tradicional enfoque centrado en el profesor está perdiendo relevancia a medida que se da más importancia al aprendizaje centrado en el alumno. Este enfoque, denominado el aula invertida, está centrado en el estudiante y en los usos prácticos de la tecnología en la educación, permitiendo a los alumnos formarse de manera mucho más eficiente y fomentando el pensamiento lateral y crítico.La enseñanza que antes tenía lugar dentro de los confines del aula se traslada ahora a la red. El nuevo modelo de aula invertida prioriza el tiempo de clase dedicado al debate, a las tareas y al aprendizaje cooperativo, haciendo hincapié en las nuevas tecnologías aplicadas al aprendizaje. Los estudiantes de la actualidad son nativos digitales, por lo que es imperativo que los profesores tengan acceso a los recursos adecuados para seguir el ritmo de la creciente cultura tecnológica.Por ejemplo, el uso de vídeos en el aula llega a niños con diversos estilos de aprendizaje, ya sea visual, auditivo, físico o verbal. El aprendizaje mediante vídeos motiva e involucra más a los alumnos al permitirles aprender a su propio ritmo. Los alumnos pueden volver a ver los vídeos en cualquier momento y lugar, incluso desde sus teléfonos móviles. La enseñanza mediante vídeos o cursos online pregrabados permite también a los profesores ahorrarse muchas horas de enseñanza repetitiva. En efecto, las pantallas no son nuestras enemigas.En la nueva era del aprendizaje, la tecnología juega un papel fundamental en los procesos de enseñanza de niños y adolescentes. Cientos de herramientas educativas digitales han sido creadas con el propósito de dar autonomía al estudiante, mejorar la administración de los procesos académicos, fomentar la colaboración y facilitar la comunicación entre profesores y alumnos.El propósito de este libro no es otro que presentar numerosos y valiosos recursos que los profesores pueden utilizar a la hora de aplicar la tecnología al proceso de aprendizaje.