Domingo José Estévez
Johan quedó huérfano antes de la adolescencia pero tuvo la fortuna de ser criado por doña Sagrada, su nana, quien estaba al servicio de la familia Salazar. Sin saber por qué empieza una persecución en su contra, decidido a cerciorarse personalmente de la veracidad de las acusaciones que se le imputaba incluido el ametrallamiento de su coche, tomó la decisión de salir del país. En medio del desastre logran secuestrarlo.